Descubrí las aventuras del teniente Blueberry de niño. De la mano de viejos cómics, ejemplares muy anteriores a mi generación, que aún vendía el estanquero del barrio, justo debajo de casa de mis padres, gracias a su enorme fondo de almacén. Números de #Pulgarcito y sobretodo del #Mortadelo de #Bruguera... Algo así como las versiones españolas del #Pilote original francés, que compraban tanto primero mi abuelo como después mis padres para mis hermanos. Con todo aún por descubrir, tardé en saber que Giraud y Moebius eran el mísmo autor (también leía el #Cimoc y otras revistas de mis hermanos mayores). Y que a la par de las películas del oeste tanto rodadas en #Hollywood como en #Almeria, #Madrid, #Burgos, #Granada o ya en los estudios romanos de #Cineccità, el western formaba parte fija de mis historias favoritas de infancia, así desde entonces. Esos mismos estilos de interpretar e...